Santo Domingo, D.N. — El periodista Ramón Tolentino protagonizó una airada y contundente denuncia pública ante la inacción de las autoridades frente a las amenazas y ataques perpetrados por Ángel Paredes Medina, alias Guindo, líder de la banda conocida como “Los Fantasmas”. Tolentino lamentó la pasividad del Gobierno y de la Ministra de Interior y Policía, Faride Raful, a quienes acusó de no prestar atención a las advertencias sobre la violencia que desataría este criminal en el país.
Tolentino estalló durante su segmento en el programa Esto No es Radio, luego de que un testigo fuera tiroteado por varios encapuchados este martes, justo al salir del Palacio de Justicia de Santo Domingo Este. La víctima fue identificada como Bryan de la Rosa, de 30 años, quien fue llevado de emergencia al Hospital Darío Contreras, centro, según reveló el periodista, que debió de ser reforzada la seguridad para proteger su vida. Meses antes, la casa de la madre de Bryan ya había sido tiroteada como advertencia para que retirara la querella.
Lo más grave fue el intento de rematar al joven herido en el Hospital Traumatológico Ney Arias Lora. Tolentino describió el día del ataque como “el día más difícil” y tuvo que asumir funciones que le correspondían al Estado al tener que gestionar que se enviaran más agentes al lugar para proteger la vida de la víctima.
El panelista seguró que tuvo que realizar múltiples llamadas para asegurar la protección del hospital. Llamó al director de Salud Pública, el doctor Mario Lama, al director del Ney Arias Lora, y al director de la DICRIM, el general Matos Pérez, para solicitar refuerzos de patrullas, debido a que solo habían cinco policías en el hospital (dos comiendo, uno durmiendo y dos conversando), y Guindo conocía esta información. La banda de Guindo había anunciado que atacaría a enfermeros o doctores que se pusieran en medio.
Tolentino señaló que la magnitud de las operaciones de Guindo sugiere que no hay capacidad para que un señor opere de esa magnitud sin un cómplice dentro del gobierno, señalando directamente a los condenados por narcotráfico dentro del Partido Revolucionario Moderno (PRM).
A raíz de la frustración del intento de remate, la banda de los fantasmas publicó amenazas explícitas en redes sociales, advirtiendo a “todo el contrario que coja su orilla” y que “todos se van,” refiriéndose a los querellantes. Los familiares de las víctimas se vieron obligados a dar entrevistas de espalda a la prensa por temor a Guindo, para evitar ser identificados y asesinados.




