En la próxima década, la Inteligencia Artificial (IA) transformará prácticamente todos los aspectos de la vida humana. Desde salud y educación, hasta justicia y entretenimiento, los avances en modelos como GPT, robótica autónoma, neurotecnología e IA general podrían redefinir la relación entre humanos y máquinas.
Expertos proyectan que en 10 años podríamos ver:
- Asistentes personales avanzados que gestionen nuestra vida diaria.
- IA médica que diagnostique con precisión superior a especialistas humanos.
- Educación personalizada basada en algoritmos de aprendizaje adaptativo.
- Automatización masiva de empleos, lo que obligará a repensar el mercado laboral y la renta básica universal.
- Cuestiones éticas urgentes, como el uso militar de la IA, la privacidad y el control algorítmico.
“Estamos en la infancia de una revolución. El reto será asegurarnos de que la IA beneficie a todos, no solo a unos pocos”, señala el experto en ética tecnológica, Timnit Gebru.
